16/10/11 12:32:00
Qué buena foto Rafa, es tan simple que me hizo recordar a la anécdota de Leonardo da Vinci cuando fue a competir por el trabajo en el Vaticano, llego a ultimo momento, parecía imposible hacer algo para ganar: Se sentó y dibujó un círculo y un punto central tan perfectos que fue el elegido.
/ Esta foto está genial porque tiene las huellas de la madre, el hijo y el amor, me queda la sensación de celebración.
Isidro Solórzano