APUNTES DE COLOR – 4/7
“El acento color”
Generalmente nuestra atención se ve atraída por los colores vivos, al fotógrafo que disfruta de la fotografía en colores, le es difícil resistir la tentación de sacar fotos cuando visualiza colores brillantes como el amarillo, rojo o azul. En este caso desarrollaremos como tratar pequeños detalles de color cálido dentro de la imagen.
Hay quienes opinan que componer en blanco y negro es más sencillo dado que solo tienen en juego el blanco, el negro y los grises. Por supuesto los amantes del blanco y negro opinan lo contrario dado que su composición e imaginación debe ser más abstracta. Quienes estamos del lado de la “composición en color” consideramos que esta es más compleja dada la diversidad de colores y combinaciones posibles que esta nos ofrece, y la diversidad de relaciones cromáticas existentes. Personalmente opino que “la vida la veo en colores, por lo tanto necesito registrarla de tal manera”, aunque a veces los miento un poco para resaltarlos. Bueno… igual que la vida!
En la fotografía en color es muy importante saber de que forma estos se relacionan unos con otros. Así como la música nos puede resultar “armoniosa” o “disonante”, los colores también pueden actuar de la misma forma. Algunos armonizan bien con otros (“armonía color”) y otros chocan (“contraste color”). Es muy importante conocer o tener siempre presente el círculo cromático, en él los colores del espectro forman un círculo en el que los colores adyacentes (por ejemplo rojo y anaranjado) se combinan armoniosamente y los opuestos contrastan (azul y amarillo).
Al componer una fotografía en colores es muy importante tener claro las relaciones cromáticas. Si componemos utilizando colores vivos (por ejemplo primarios bien iluminados) en este caso no conviene utilizar muchos dentro de una misma foto, dado que compiten entre si, lo ideal es utilizar solo tres. Si se quiere componer utilizando “contraste color”, estos deben ser solo dos, opuestos en la rueda de los colores. Si se desea componer con “armonía color” estos pueden ser varios pero adyacentes en la rueda.
En el particular caso de “acento color”, este debe ser “único” y preferiblemente de color cálido, que transmita énfasis a la imagen. El “acento color” se puede definir como una pincelada de color atrayente, pero que ese color no sea el motivo principal de la foto, sino tan solo un complemento dentro de esta. Puede ser el único color cálido en la foto, pero su individualidad lo debe aislar de los demás. Varios elementos similares y del mismo color, dejan de ser “acento” para pasar a ser “colores aislados”.
Un día lluvioso es ideal para encontrar el “acento color”, dado que la ciudad adquiere el típico tono gris monótono y dentro de ella puede aparecer una persona con un paraguas de colores fuertes. También el ejemplo puede encontrase en el mar con un velero colorido sobre un mar azul.
El rojo, amarillo y naranja son los colores mas indicados para el acento color, dado que no solo llama la atención dentro del cuadro sino que ayuda a dar profundidad y proporción a la imagen bidimensional.
Este punto de color calido debe ser pequeño, de aproximadamente un cinco por ciento de la superficie de la fotografía, además de estar ubicado de tal forma que la vista pase del punto de interés al resto de la imagen. No debe dominar la fotografía porque sino distrae la atención y compite con el punto principal. Deja de ser “acento color”. Si el área de color es muy grande o esta en el centro de la foto, esta pierde el carácter de “acento color”.
Hay un ejemplo muy sencillo y cotidiano, la mujer coqueta que se pinta sus labios de rojo, estos se destacan, sus labios pasan a ser el acento color de su figura, llaman la atención pero no son el punto principal de la figura femenina.
La dimensión que el color transmite a la fotografía se hace evidente en las imágenes que tiene un acento color. Estas situaciones se pueden captar durante una tormenta o cuando el cielo se cubre totalmente en la ciudad. Solo hay que observar y esperar a que el sol se refleje en alguna ventana, introduciendo un acento dorado.
Imaginemos un esquiador vestido de rojo en una amplia pendiente de nieve. Su color rojo será atrayente a la mirada del observador, este deberá ser un punto preferiblemente pequeño, un complemento dentro de ese paisaje y que su ubicación dentro del encuadre no este en el centro, para que equilibre asimétricamente con el resto del paisaje. Si el objetivo es tomar un retrato de este esquiador, entonces su color rojo dominará la foto, dejando de ser un acento color y el complemento del paisaje.
Un acento color puede crear o destruir una fotografía. Si armoniza con su entorno, se puede transformar en el centro de una composición equilibrada. Si contrasta se destacará. Pero en muchos casos no es cuestión solo de controlar los efectos de los colores fuertes, sino simplemente en la introducción de un color cálido en una escena aburrida o sin vida, especialmente si las condiciones de luz no son buenas.
Un día soleado, de luz directa, los colores resaltaran, serán más brillantes, se destacaran. Sin embargo un día nublado pero luminoso, todos los colores serán más naturales. Sin embargo un día muy nublado, un amanecer o crepúsculo, donde la luz es más tenue o rasante, los colores se registraran distorsionados. Salvo que el objetivo de la imagen sea trabajar con esos colores confusos. La otra opción técnica de corregir los colores y registrarlos lo mas parecido a la realidad, es utilizando en las cámaras digitales el “balance de blancos”, o en las cámaras analógicas los filtros correctores de temperatura color.
Vicente Viola, Fotógrafo Urbano, (Texto y fotografías) www.vicenteviola.com.ar,
Director de la Escuela Superior de Formación Fotográfica de La Plata. www.foto-escuela.com
Fabrica de queso. Villa Maria.
Este es un caso muy bien resuelto de “acento color”, el gorro naranja del operario del queso, es un color cálido y esta utilizado en la correspondiente proporción de un 5% de la foto. Llama la atención pero no es el punto principal de la imagen. (Sony DSC V5, ISO 400, 1/40, f:8)
Urbana. Zurich.
Instantánea urbana. El momento justo. Interesante composición de figuras humanas: la de la mujer en primer plano, casi una silueta, y en segundo plano un ida y vuelta de bicicletas que equilibran la imagen. Uno de los ciclista lleva un casco rojo, perfecto ejemplo de acento color. (Nikon D200, ISO 400, 1/350, f:9,5)
Logo. Paris.
Imagen abstracta de un logo de color sobre la fachada de un edificio. Buen ejemplo de acento color, dado que el círculo rojo, es pequeño, es llamativo, está bien iluminado, pero no es el motivo principal de la foto. La franja azul se complementa muy bien con el fondo azul del cielo. (Nikon D100, ISO 200, 1/640, f:13)
Escollera. Necochea
Imagen ideal para un ejemplo de “armonía color”, hay azules, celestes y un sutil color lila del dibujo de los pescados. El negro y el gris funcionan como neutros. Pero hay un detalle de color, el pequeño faro amarillo y rojo, que funciona perfectamente como “acento color”, el motivo principal de la foto es el banco que se complementa armoniosamente con el fondo del mural. (Sony DSC V5, ISO 100, 1/320, f:6.3)
Colores aislados. Bombinias.
El “acento color” para funcionar como tal, debe ser único dentro de la imagen. Este ejemplo serviría muy bien para “contraste color” (amarillo sobre cielo azul) o para “colores aislados” (un mismo color que se repite varias veces), por lo tanto es una interesante imagen compuesta por 3 chimeneas amarillas, recortadas sobre el cielo y complementadas con las varias líneas de cables de la calle. Pero no es un ejemplo de “acento color”. (Sony DSC V5, ISO 400, 1/500, f:8)
Acceso. La Plata
Normalmente el “acento color” funciona con los colores cálidos. En este caso de una equilibrada fotografía geométrica, de un azul sobre un fondo de gris neutro, funciona muy bien para resaltar el punto principal de la foto (el dibujo y el texto), es llamativa pero no es un “acento color” dado que es el punto principal de la foto y debiera ser “el color” un complemento. (Nilon D100, ISO 400, 1/80, f:5.6)
Trencito. Canela.
Detalle de un viejo y pequeño tren. Colores vivos de la luz dura del medio día. Sencillamente la línea roja funciona como “acento color”, sutil, alargada y contrasta con el fondo negro del tren. (Nikon D100, ISO 400, 1/800, f:8)
Torre. Paris.
Angulo contrapicado de la torre Eiffel. Con una pequeña inclinación de la cámara hacia la derecha para darle un poco de dinamismo a la foto. Amanecer de un día soleado. El círculo rojo de prohibido estacionar funciona muy bien como “acento color”, es pequeño y no es el motivo principal de la foto. (Nikon D100, ISO 100, 1/320, f:9.5)
Cubos. Berlín.
Particular imagen dominada cubos urbanos. Si bien parece una imagen en blanco y negro de un día nublado, la foto es en colores, y el único color es el rojo de una persona. Y si bien ese color lo lleva la presencia humana, no es el punto principal de la imagen, porque es muy pequeño y porque el dominante visual de la foto son las formas grises y variadas de los cubos. (Nikon D7000, ISO 800, 1/640, f:6.3)
Estacionamiento. Roma.
De todos los ejemplos, este quizá sea el acento color más grande dado por el auto rojo. Pero cumple con la regla. El impacto visual de la foto primero es el ángulo plomo, luego la presencia humana en movimiento y por último el grupo de 3 autos. Complementa muy bien y le da marco a los 3 autos, el marco amarillo del estacionamiento. (Nikon D200, ISO 800, 1/20, f:5)
Vicente Viola, Fotógrafo Urbano, (Texto y fotografías) www.vicenteviola.com.ar,
Director de la Escuela Superior de Formación Fotográfica de La Plata. www.foto-escuela.com