Buceando en las redes sociales , mas específicamente en Facebook , tuve por un instante una sensacion de DEJA VU al ver fotografias mías en una exposición, fotos que otrora integraran una muestra fotografica de mi autoria llamada "SEXTANGO ", publicada oportunamente en la Galeria de Autores Argentinos de Fotorevista y exhibida en la Fotogaleria del Foto Club Buenos Aires, esa sensación me duro poco, porque dio paso a otro tipo de sensación... la de indignación, al comprobar que no eran fotografias, sino pinturas del Sr WALTER TERE, oriundo de la localidad de Roque Perez , formando estas parte de una muestra sobre tango de distintos autores expuestas en Espacio 10 Art Gallery.
Mas alla de los valores pictóricos que dichas obras pudiesen tener, eran copias fieles de mis fotografias, salvando pequeños detalles. Utilizando dicha red social, le informe al Señor TERE el significado de la palabra PLAGIO, los alcances del articulo 17 de la Constitucion Nacional referida a los DERECHOS DE AUTOR, sus consecuencias LEGALES, y DEMAS YERBAS...
La respuesta no se hizo esperar y tras el pedido de disculpas logico, y mediante una tibia explicación sobre la utilización de imágenes captadas al parecer " EN TIERRA DE NADIE " que al creer de muchos es INTERNET procedio a borrar todo vestigio en su MURO y por supuesto BLOQUAERME en el mismo, inhibiendo toda posibilidad de comunicacion con el.
Mas alla del tema anecdotico, y de las explicaciones justificadas por propias carencias, deberíamos plantearnos: qué es ser ARTISTA . Si la búsqueda de notoriedad o reconocimiento público esta por encima de la propia autoestima, podemos engañar al otro, pero sólo los mediocres se engañan a si mismos.
Ser ARTISTA, creo, es buscar el propio lenguaje comunicacional, y si tenemos condiciones, tal vez lograremos NOTORIEDAD Y RECONOCIMIENTO PUBLICO, si esto es lo que buscamos.
Considero que Internet es una VENTANA AL MUNDO que sirve para ver y ser visto y no un COTO DE CAZA, en donde cualquiera se crea con derecho de apropiación de la obra del otro o cercenar la misma en partes, en una desenfrenada antropofagia intelectual.
Respetemos la propiedad intelectual y los derechos de autor, mas alla de las consecuencias que no hacerlo nos pueda acarrear, es una forma de respetarnos a nosotros mismos como personas y sobre todo como artistas.
Asi como la belleza de una mujer no nos debe impedir ver a la persona que la porta, que la belleza de una obra de arte, no nos haga olvidar que atrás hay un artista que la creó y forma parte de su patrimonio intelectual, moral, espiritual y material .