Responder06/01/14 18:20:11
Gritan la obscenidad de estos tiempos, donde mentes enfermizas se vanaglorian por `lo logrado`. La degradación en su máxima expresión. Jóvenes que han alcanzado el bienestar, ya no en los ladrillos como habitat y como sustento, sino en el plástico, material que donota una gran bonanza de la modernidad imperante.El desquicio merodea y se enseñoréa. !Vaya relato éste¡
Ruben Ricardo Arteaga