FotoRevista ¦ 24 años en la web
Recordando un poco el tiempo de las clases de idioma español del colegio San Luis, hace un tiempo se me dio por escribir una composición que tuviera como protagonista a mi madre, recordar algo de su vida y no pude evitar escribir de su “parentela” o sus descendientes. En este año cumplió sus 92 años y la vida le ha permitido ser madre, abuela, bisabuela y tatarabuela. Esta es una pequeña reseña sobre su vida, sus hijos, sus nietos, sus bisnietos y sus tataranietos, que recientemente he actualizado. María Francisca Cantero Fernández nació un 9 de marzo de 1925 y sus primeros años transcurrieron en el paraje Molles de Quinteros, 11ª sección de Durazno, siendo hija única de Francisco Cantero y de Isabel Fernández, por entonces puestero en estancia El Retiro. El inicio escolar la trajo a Durazno y fue una de las tantas alumnas del Colegio Inmaculada Concepción. Aprendió costura y como modista pasó a vivir a Carlos Reyles al casarse con Severiano Fernández, oriundo también del mismo paraje. Poco a poco fueron llegando los 4 hijos, dos mujeres: María Isabel (1948) y Mirta Gloria (1950) y dos varones: Juan Francisco (1951) y José Domingo (1954). En diciembre de 1961 el destino marcó el viaje a Durazno y la radicación en el barrio del cuartel, calle San Martín, frente a la capilla San Francisco. Continuó el trabajo de modista alternando con otras tareas, como empleada doméstica y lavandera de varios pupilos y pupilas que por entonces estudiaban y residían en los colegios San Luis e Inmaculada Concepción, ambos católicos. Con el casamiento de sus hijas vinieron los nuevos descendientes, inaugurando el título de abuela: Richard Marcel (1967), el varón, por parte de María Isabel la hija mayor y la primera nieta: Mónica Gabriela (1968) por parte de Mirta Gloria. En 1970 quedó viuda pero ambas hijas le arrimaron más nietos y nietas. En 1978 el menor de los hijos varones arrimó el suyo, José María y el 31de diciembre de 1983 nació la primera nieta de parte del otro hijo, Paola Marina. Hasta 1989 sumaron 21, los ya nombrados y: Humberto Carlos, Sandra Leonora, Marta Mabel, Elías Ricardo, Silvia Nair, Mario Raúl, Mirta Alejandra, Olga Isabel, Nélida Susana, Alberto Renée, Andrés Wilson, Ruben Edmundo, Pablo Martín, Fernando Gastón, Pedro Nicolás, Carla Beatriz y Juan Carlos. La familia había seguido aumentando en 1987 al nacer su primer bisnieto: Julio César y este año (2017) con sus 92 años, el 27 de julio recibió el bisnieto 60°, Nicolás. Entre medio de ellos nacieron: Addis María, Jonathan Javier, José Agustín, Viviana Yissel, Gonzalo Damián, Braian Humberto, Esteban, Fabiana Anabella, Lucía Valeria, Rodrigo, Maida Rossana, Fabio Andrés, Stefanie, Maicol, Sofía Macarena, Cristian, Dayana Elizabeth, Yésica Tatiana, David, Leonardo Airton, Katherine, Flavia Patricia, Liliana María, Mario, Darwin Daniel, Magali Elizabeth, Sheila, Mauricio, Florencia, Facundo, Agustín, Nahuel, José Carlos, Cristofher Eliazar, Nicolás Damián, Lucas Gabriel, Iván, Santiago, Brandon Jesús, Exequiel, Axel Ronaldinho, Milagros, María Paz, Steven Ismael, Avril, Tomás, Milagros Guadalupe, Steven Exequiel), Benjamín, Milagros Agustina, Micaela, Agustina, Fabricio Thomás, Agustín, Sebastián, María Pía y Maia. El 1° de septiembre de 2009 llegó su primera tataranieta, Martina iniciando así la 5ª generación, luego se sumaron Santiago, Gennaro, María Isabel y Mateo. Así tan sencillo como este relato y como dice la canción de Los del Suquía, “Entre pañales mojados y canciones maternales… y va pasando la vida”…Y un datito que no es menor, a todos, siempre les ha hecho alguna prenda como costurera, tejida o en crochet, el último beneficiado fue Nicolás, que tiene hoy 6 días de nacido, el bisnieto 60°. Una historia con nombres, muchos nombres, algunos más repetidos que otros, esa es mi madre. NOTA: Fotos 1 y 2 son copia de archivo de familia; 3 y 4, tomadas por mi madre con su cámara Kodak box; las restantes tomadas por mi.
