En la pequeña localidad de Egaña, en el Partido de Rauch, a poco más de 275 km de Buenos Aires, se encuentra una vieja mansión abandonada desde hace décadas, y que es conocida por los lugareños como “El Castillo de Egaña” o «El Castillo San Francisco». Esta vieja mansión fue construida entre los años 1918 a 1930 por el arquitecto Eugenio Díaz Vélez, nieto del prócer argentino. Cuenta con 77 habitaciones, 14 baños y 2 cocinas. El día de la inauguración ocurrió una tragedia: estaban todos los invitados en el castillo a la espera del dueño, que llegaría de Buenos Aires.el dueño no llegó pues había fallecido. Su única hija y heredera, nunca mas volvió al lugar y estuvo cerrado durante 30 años hasta 1960. Actualmente pertenece al Ministerio de Asuntos Agrarios de la Provincia de Buenos Aires