Responder07/12/14 01:23:54
Muchas gracias Javier, Rafa, Gustavo, Luis Alberto y Gerardo! (les respondo a todos juntos porque quizá me sancionen si lo hago todo por separado). / El entorno es justamente lo maravilloso de la foto, en mi opinión. Es un taller de pintura que lleva 50 años de trayectoria, atendido por sus dueños (primero el abuelo, que pintaba a mano las carrozas fúnebres, luego su hijo y ahora el nieto, Walter -el señor de gorra roja-). / Trabaja muy relajadamente, disfruta mucho de lo que hace, todo a la vieja usanza (quizá lleguen a ver los secadores de pintura, reliquias sobre las que a las 7 de la tarde, con el taller cerrado, asan bifes para el perro Nacho). / Walter trabaja con no más de dos autos a la vez, aún contando con ese inmenso espacio. Pero como les cuento, le gusta disfrutar y no estresarse. / Dado su desapego a los bienes materiales, y tratándose de un trabajador que no persigue grandes ambiociones económicas, el taller se encuentra en las mismas condiciones que hace 20 o 30 años atrás, mostrando el implacable y a veces dañino paso del tiempo. Pero conservando por ello la preciosa estética del pasado. / Tanto es lo que me fascina éste lugar que he tenido que contarles todo jajaja. / Saludos a todos y gracias otra vez por comentar.
Laura Cuneo