Marcelo Zalazar

M. Jurado Año de FR
4° Mención Mes de FR
Foto del Día de FR
1º F.Día Participantes
Tema: Documental y Periodistica - Enviada el 12/11/11 a las 11:18:32 - Obra N° SFOT111112111832 

"Window 2011"

  A veces me sorprendo en cuanto dependemos de la tecnología, Telefonía Celular, Windows, Internet, Facebook, Blogs, Twitter y demás. Es sabido que en muchos casos todas estas cosas han venido a solucionarnos ciertos espacios en nuestras vidas, pero en otros aspectos cuanto nos alejan de la realidad. Hace un tiempo atrás las Naciones Unidas publicó un documento que pronostica que en los próximos diez años podremos erradicar a la pobreza de nuestro continente. Estas esperanzadoras palabras pintan un futuro donde nuestros hijos podrán crecer libres del fantasma de la incertidumbre y los espantos del hambre y la falta de servicios esenciales. Antes de cantar victoria deberíamos tomar en cuenta que existe una dimensión de la pobreza poco evidente en dicho informe. Para quienes trabajan con alta tecnología, es un truismo que en la próxima década uno de los ángulos más agudos de la pobreza será el de la falta de recursos y conocimientos tecnológicos. Hoy tenemos, indudablemente, quinientas veces mas tecnología que hace diez años. Lo más impresionante no es este número astronómico, sino el hecho de que para los pobres la tecnología no crece a este ritmo. Es decir que hoy los ricos son 500 veces más ricos que hace diez años, los pobres casi igual de pobres. En diez años, los ricos serán otras 500 veces mas ricos que hoy y los pobres casi igual de pobres. Hace algunas semanas saqué esta foto y allí, con teléfono celular, computadora de bolsillo y cámara computarizada, me encontré con un grupo de niños que miraban asombrados mi despliegue tecnológico. Para ellos mi computadora, un modelo que lo único que le falta es no tener teclado, resultó incomprensible. En casa, sin embargo, mi hija de cinco años utiliza un teléfono celular, una computadora o una cámara con la destreza de quien los considera aparatos caseros. La tecnología, al igual que el dinero y los recursos naturales, no se distribuye en forma equitativa. Los ricos tienen mucho y los pobres muy poco. Pienso en las cifras exorbitantes que manejan las grandes corporaciones, en este caso el gigante Microsoft con su Windows XXXX y me toca reflexionar al respecto (ojala no me equivoque) y en un futuro cercano se tomen las medidas necesarias para que esta tecnología esté al alcance de muchos mas, y así de esta forma, estos niños puedan abrir mas que la ventana de su casa.