Tema: Fotografia de Autor - Enviada el 13/08/13 a las 18:49:23 - Foto N° 130813184923
"Rostros II: María Lujan Rey"
(Buenos Aires/Argentina, , Argentina)
Mi página Exposición fotográfica e instalación audiovisual
“Rostros II” de Pablo Tesoriere.
Rostros II es un ensayo fotográfico y fílmico que busca generar conciencia y memoria a partir de imágenes de personas que han perdido un ser querido y/o que han trabajado, en nuestro país,
en la defensa de los derechos humanos.
Cada uno de ellos fue retratado y filmado junto a un objeto que identifica al familiar perdido, mientras relatan los casos vividos y la lucha que mantienen, día a día, para generar memoria.
Contando sobre su activismo social para un futuro mejor, que surgió a partir del dolor que les tocó vivir y que siguen padeciendo en la actualidad.
Retrato de Maria Lujan Rey
El 22 de febrero del año 2012 a las 8:33 AM, la formación 3772 del ramal Sarmiento entró en la estación terminal de Once y no frenó. La formación, de ocho coches, transportaba en plena hora pico a más de 1200 pasajeros a bordo. Fallecieron 51 personas y más de 702 resultaron heridas. Lucas Menghini fue uno de los fallecidos, pero su caso causó conmoción a nivel nacional. Su búsqueda duró dos días y demostró cabalmente la improvisación oficial existente a la hora de resolver tragedias de este tenor. Su cuerpo estuvo desde un principio en el cuarto vagón de la formación y nadie lo vio.
Lucas tenía 19 años y dos pasiones en la vida: la música y su pequeña hija Guadalupe Paz. Convertido hincha de River (en su infancia fue de Boca), no sintió tanto el descenso a la B como la muerte de Luis Alberto Spinetta. La muerte de Lucas transformó a su padre Paolo Menghini, periodista y editor de video, y a su madre, docente, en las voces más dramáticas de una tragedia que podría haberse evitado.
La lucha tanto de María Lujan como la de Paolo, son ejemplo de militancia social en un país con poca memoria y una justicia plagada de dudas.
“Lucas dejó de ser sólo nuestro en el mismo momento en que un país entero lo buscaba (...) Dejó de ser sólo nuestro cuando millones de argentinos lloraron su muerte absurda y tan injusta como la de las demás víctimas del 22 de febrero… Pedimos a la Justicia que se expida de una buena vez. Seguimos esperando los procesamientos de los imputados de esta causa, que es también la causa de los que lo sienten su hijo, su hermano, su sobrino, su amigo. Su corazón de roble sigue latiendo aún cuando los responsables de no haberlo buscado sigan libres” (María Lujan Rey).