02/04/19 18:17:47
Te cuento una anécdota Alicia. Fuimos con mi pareja, aún sin tener familiares ni amigos allí, solo por que son chicos argentinos que injustamente quedaron en ese lugar. Fuimos unos de los primeros en bajar del barco, con otras personas, ocupamos una camioneta para llegar al cementerio, distante a 90 kms. del puerto e íbamos con otro matrimonio que eran de Bs. As. y que ya habian estado en otra oportunidad. Con su experiencia, llevaban algunas flores artificiales para colocar en algunas tumbas. Cómo nosotros no tuvimos en cuenta ese detalle, la señora ofreció a Marta, mi pareja, una flor para que la colocara en una tumba. Es tan grande la sensación de lo que se vive en ese lugar y en esos momentos, que Marta no atinaba a dejársela solo a uno. Así fue que pensó, voy hasta el final del camino y la dejo en la ultima tumba. Cual fue su sorpresa al llegar a la tumba señalada? El soldado allí enterrado era de nombre Danilo, casualmente el mismo nombre de su hijo. Esto golpeó más aún en ella. Todo es muy triste.
Eduardo Jorge Pompei
