Tema: Retrato - Enviada el 09/11/20 a las 17:41:34 - Foto N° 201109174134
"Rastros de dulce de leche"
Los niños vienen en tamaños, pesos y colores surtidos.
Se les encuentra dondequiera: encima, debajo, dentro, trepando, corriendo, saltando. Las mamás los adoran, las niñas los odian y las hermanas y hermanos mayores los toleran; los adultos los desconocen y el cielo los protege.
Un niño es la verdad con la cara sucia, la sabiduría con el pelo desgreñado, la esperanza del futuro con una rana en el bolsillo.
Un niño tiene el apetito de un caballo, la digestión de un traga espadas, la energía de una bomba atómica, la curiosidad del gato, los pulmones de un dictador, la imaginación de Julio Verne, la timidez de una violeta, la audacia de una trampa de acero, el entusiasmo de una chinampina, y cuando hace algo, tiene cinco mil pulgares en cada mano.
Les encantan los dulces, las navajas, las sierras, la navidad, los libros con láminas, el chico de los vecinos, el campo, el agua (en estados naturales ), los animales grandes, papá, los tren de la vida, los domingos por la mañana y los carros de bomberos.
Les desagradan las visitas, la doctrina, la escuela, los libros sin láminas, las lecciones de música, los peluqueros, los abrigos, los calcetines, y la hora de acostarse.
Nadie más que él se levanta tan temprano ni se sienta a comer tan tarde.
Nadie más que él puede embutirse en el bolsillo un cortaplumas oxidado, una fruta mordida, medio metro de cordel, un saquito de tabaco vacío, caramelos, seis monedas, una honda, un trozo de sustancia desconocida y un auténtico anillo supersónico con un compartimiento secreto.
Un niño es una criatura mágica: usted puede cerrarle la puerta del cuarto donde guarda las herramientas, pero no puede cerrarle su corazón; puede echarlo de su estudio, pero no puede echarlo de su pensamiento.
Todo su poderío se rinde ante él.
Es su carcelero, su amo, su jefe... El niño un manojito de ruido, carita sucia; pero cuando usted llega a su casa por la noche, con sus esperanzas y sus ambiciones hechas pedazos, él puede remediarlo todo con dos palabras mágicas. ` Hola papis `.
Autor desconocido