El Otro / Ricardo Kon
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"El Otro"
Ricardo Kon
Buenos Aires, Argentina
ricardo.kon@gmail.com Volver El Otro interrumpe la existencia egocéntrica del “yo económico”.
El rostro del Otro (el hecho de que me estás presentando tu rostro, no tu querer o tu desear) me hace darme cuenta de una prohibición fundamental (¡No me mates!) y una obligación fundamental (¡haz un lugar para mí en el mundo, dame apoyo y ayúdame a vivir, sé hospitalario, asísteme y sírveme!).
Tu rostro es el primer rostro que percibo. Me comanda.
La relación entre Tú y yo es asimétrica: Tú estás “alto”. Yo debo mirar hacia arriba para verte. No me percibo a mí mismo de la misma manera que te percibo a tí. No me veo inmediatamente a mí mismo como igualmente respetable, “alto”, demandando y comandando.
Puedo dedicar y sacrificar mi vida por el Otro, pero no puedo demandar del Otro que sacrifique su vida por mí. Mediante el confrontarme con tu presencia, tú cambias la “economía” de mi mundo: tú me haces volverme a tí, que te has vuelto ahora el centro que demanda mi atención. Yo soy responsable de la vida del Otro, aún de la responsabilidad del otro.
El Otro es así revelado como absoluto e “infinito”.
El Otro único que me sorprende representa a cada individuo que puede convertirse en el Otro (del
Otro o mío). Todos ellos virtualmente demandan mi servicio. Sin embargo, es imposible dedicarse enteramente, y dar todo lo que tengo y soy a cada uno de ellos. Para cumplir con mi responsabilidad a todos ellos, debo tratarlos y pensar en ellos como participantes de la comunidad que forma entre ellos y conmigo (esto es, como miembros de un pueblo o nación o familia o religión o la humanidad como una totalidad social).
Adriaan Peperzak Ph.D
El límite de la fotografía es nuestro propio límite
