Un safari fotográfico al Perú / J.Sandá
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"Un safari fotográfico al Perú"
Jorge Sandá
Buenos Aires, Argentina
jorge-sanda@fibertel.com.ar Volver on un grupo de fotógrafos partimos desde Ezeiza a la Republica hermana de Perú, nuestro primer destino fue la Ciudad de Lima, capital del Perú. Está ubicada en la costa central del Perú, a orillas del Océano Pacífico, en los valles de los ríos Chillón, Rímac y Lurín. Forma un área urbana continua con el puerto del Callao. Fue fundada por el conquistador español Francisco Pizarro el 18 de enero de 1535, como la Ciudad de los Reyes. Fue la capital del Virreinato del Perú durante el régimen español y después de la independencia pasó a ser la capital de la República del Perú. En la actualidad cerca del 26.6% de la población peruana vive en su área metropolitana, aproximadamente 8.447.260 habitantes. Luego de un día de estadía, partimos en avión hacia la ciudad de Cuzco.
La ciudad del Cusco (quechua: Qusqu, Qosqo ) o Cuzco, grafía reconocida por las Academias de la Lengua Española, es la capital del departamento homónimo del Perú. Está situada en la sierra sur del país. Actualmente cuenta con aproximadamente trescientos mil habitantes. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1983 por la UNESCO. Fue capital del Imperio Inca y es considerada la capital histórica del Perú. La convivencia entre el estilo colonial español y la tradición precolombina se visualizan en cada una de las casas y edificios con techos de teja y grises muros de piedra, edificadas en estrechas callecitas empedradas, que invitan a deambular para descubrir sus numerosos atractivos. Donde se puede apreciar mejor la influencia española es en La Plaza de Armas, donde los conquistadores derribaron lugares sagrados, y construyeron edificios de 2 plantas y frentes con arcadas que se conservan hasta la fecha. Otros sitios importantes de la ciudad de Cuzco son: El templo de Santo Domingo, Korikancha, La Iglesia de la Compañía, el Convento de Santa Catalina, Sacsayhuaman.
Después de 3 días de visita a la ciudad de Cusco, nos dirigimos hacia el punto culminante de nuestro viaje, la visita a la ciudadela de Machu Picchu. Partimos en el tren Vistadome hasta la localidad de Aguas Calientes y de ahí en micro hasta la puerta de la Ciudadela de Machu Picchu, en un trayecto de media hora aproximadamente, por camino de montaña. Al llegar se siente una gran emoción, mezcla de ansiedad y misterio que nos invade desde el momento que dejamos el tren, y nos a preguntamos que es Machu Picchu. Luego de recorrerla, en nuestro caso en dos días, decimos que es la ciudad perdida de los Incas, el reino del sol, obra de la civilización más grande que ha habitado América del Sur. Nadie puede decir a ciencia cierta cual fue la naturaleza de esta obra del siglo XV, fundada entre los cerros Machu Picchu y Huayna Picchu, a 2400 metros de altura y que fuera descubierta 5 siglos después por el norteamericano Hiram Bingman en 1911. Al recorrerla y a medida que aparecen los edificios, se nota una organización urbanística planificada hasta el menor detalle, donde se destaca la perfección de los bloques de piedra, cortados y encastrados con una precisión milimétrica. Machu Picchu fue descubierta físicamente, pero el misterio que la envuelve perdurara por los siglos de los siglos.
De regreso de Machu Picchu en el mismo tren que nos trajo desde Cusco, descendimos en la estación de Ollantaytambo, para visitar el Valle Sagrado, única ciudad incaica viva, donde las viviendas conservan los viejos cimientos de las casas incaicas, visitando lugares como: Chinchero, el mercado de Pisac, Urubamba, las salinas de Maras y el laboratorio agropecuario de los incas en Moray, regresando a Cusco y luego volver a Buenos Aires, fin de nuestros servicios, como dicen en las agencias de viaje.
El límite de la fotografía es nuestro propio límite
