Homenaje a los Maestros / D. de Torres
GaleríaTexto Volver a Galerías de Autores
"Homenaje a los Maestros"
Dolores de Torres
Buenos Aires, Argentina
doloresdetorres@arnet.com.ar Volver Una fotografía es una presencia equívoca. Aparentemente plana, bidimensional y silenciosa. Sin embargo, cuando nos sorprende una imagen cargada de poesía, comenzamos por creer en ella y el fenómeno estético golpea en el centro de nuestro esternón, ese punto que soporta el peso de la angustia; que recibe los sonidos de la música; las palabras de amor; el olor de la lluvia...
Invade nuestro cuerpo y nuestro corazón. Irrumpe frente a las verdades encubiertas que nos tocas de costado o directa y placenteramente, por crueles, felices, secretas o armoniosas que sean. transitamos dimensiones diferentes y ya no importa si participan de nuestra lógica porque nos ha conmovido. Algo en nosotros se corre de lugar, se modifica, se ensancha...crece. Y el crecimiento duele silenciosamente.
Las fotografías gesticulan, nos contestan, nos visitan, nos obsesionan.
Un instante que se fue, rastro de lo que ha sido, indicio de algún pasado que no abandona el presente, que no termina de ser ese fantasma que es de aquello que ya no está y nos obstante merodea con más entidad que el recuerdo.
El negativo es el relicario del fotógrafo, el tiempo al que se puede volver, la dimensión en que se protege a la locura.
La fotografía es seducción constante, un misterio abismal y poderoso, que no promete nada y requiere premura, porque precede y sucede a la vida. Como la existencia, que lastima y persiste en la obstinación de sus enigmas.
Dolores dE Torres
El límite de la fotografía es nuestro propio límite